La agroindustria azucarera de El Salvador ha producido más 6.7 millones de toneladas de caña de azúcar en el periodo actual de cosecha, para enero las estimaciones eran de 6.5 millones de toneladas, representando un producto esencial para el empleo y el desarrollo, impulsando la economía local y nacional.
El sector azucarero es una de las principales fuentes de ingresos para El Salvador y desempeña un papel crucial en su economía. Las exportaciones de azúcar representan una parte significativa de los ingresos por exportaciones del país. En 2023, las exportaciones de azúcar generaron aproximadamente US$184.2 millones.
La exportación de azúcar para este año subió un 94% según los datos del BCR, Los principales mercados para el azúcar salvadoreño incluyen Estados Unidos, Canadá, Taiwán y varios países de Europa y América Latina.
La producción de azúcar en El Salvador es considerable, con una capacidad anual de alrededor de 15 millones de quintales. Este volumen no solo satisface la demanda interna, sino que también permite un significativo excedente para la exportación.
La industria no solo aporta ingresos monetarios directos a través de la venta del azúcar, sino que también desempeña un papel importante en la economía local mediante la creación de empleo. Miles de salvadoreños dependen de esta industria para su sustento, tanto en empleos directos en los ingenios azucareros como en trabajos indirectos en la cadena de suministro.
El impacto económico del azúcar va más allá de los ingresos por exportaciones y la creación de empleo. La industria azucarera también contribuye al desarrollo rural, ya que muchas plantaciones de caña de azúcar están ubicadas en zonas rurales donde otras oportunidades económicas pueden ser limitadas. La inversión en infraestructura y tecnología en estas áreas, impulsada por la industria, mejora la calidad de vida de las comunidades locales y promueve el desarrollo sostenible.