Según datos presentados por el Banco Central de Reserva (BCR), la inflación anual en El Salvador alcanzó un -0.1% en octubre de 2024. Esta cifra representa una reducción de 2.7 puntos porcentuales en comparación con el mismo mes del año anterior. En el ámbito mensual, la inflación también mostró una disminución de -0.3%, siendo 0.6 puntos porcentuales menor respecto al mismo periodo de 2023.
Estos resultados reflejan un proceso de desaceleración en el aumento de precios, impulsado por diversas medidas gubernamentales. Pues, las políticas implementadas por el Gobierno, orientadas al fortalecimiento de los agromercados y al combate de prácticas de especulación y acaparamiento, han sido clave para la contención de la inflación en el país.
La inflación interanual en el rubro de alimentos y bebidas no alcohólicas ha mostrado una desaceleración notoria, impulsada por la disminución en el costo de diversas legumbres, hortalizas y frutas. En particular, se ha observado una disminución en el precio de productos agrícolas como el tomate, la zanahoria, el frijol crudo, la cebolla, la papa y el frijol de bolsa. El tomate lidera esta reducción con una caída de -0.11% en el precio mensual, seguido de la zanahoria y el frijol crudo, ambos con un -0.03%. Otros productos como la cebolla y la papa mostraron descensos de -0.02% y -0.01% respectivamente.
Esta tendencia a la baja en los precios de productos alimenticios beneficia directamente a los hogares salvadoreños, especialmente en el contexto de recuperación económica. Por otro lado, el BCR también reportó que la inflación de octubre 2023 fue del 2.7%, del 7.5% en 2022 y del 5.5% en 2021, reflejando una notable desaceleración en el aumento de precios en el país.
La disminución de la inflación en El Salvador es el resultado de una combinación de factores, incluyendo la intervención del Gobierno en el mercado de alimentos y la regulación de precios.