La economía salvadoreña continúa mostrando signos de fortaleza en los mercados internacionales, especialmente con el desempeño positivo de sus bonos soberanos. Este repunte es visto como un reflejo de la confianza en la gestión fiscal del país y en el rumbo económico adoptado por el Gobierno. En la jornada más reciente, varios títulos experimentaron alzas importantes, impulsadas por factores tanto internos como externos.

Entre los bonos que destacaron por su crecimiento se encuentra el título con vencimiento en 2030, que se cotiza actualmente en US$106.37, con un incremento del 0.43 % en la jornada. Por su parte, el bono con vencimiento en 2054 alcanzó los US$103.49, subiendo un 0.66 %, mientras que el bono a 2032 se vende a US$101.70, mostrando una ganancia del 0.21 %. Todos estos valores están por encima de su valor nominal, lo que refleja un renovado interés de los inversionistas internacionales.

Uno de los principales impulsores de este comportamiento es el reciente acuerdo alcanzado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el cual abrió nuevas líneas de financiamiento para El Salvador. A este respaldo se suma la confianza de organismos multilaterales que valoran positivamente la estabilidad económica del país y su capacidad de cumplimiento financiero.
Asimismo, el fortalecimiento de las finanzas públicas ha sido clave. Políticas gubernamentales como el Plan Antievasión y el Plan Anticontrabando han permitido incrementar los ingresos del Estado y proteger a los sectores productivos, lo que contribuye a mejorar la percepción de riesgo país y genera mayor atractivo para los mercados.

Las agencias calificadoras también han comenzado a reflejar esta mejoría en sus informes, destacando una perspectiva estable para El Salvador. Esta mejora en la calificación crediticia contribuye aún más a la confianza de los inversionistas, consolidando la posición del país en los mercados financieros internacionales.