El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva que retrasa el plazo arancelario hasta el 1 de agosto. La medida se produce después de que el gobierno estadounidense buscara nuevos acuerdos comerciales con varios países y bloques económicos. La Unión Europea era uno de los que enfrentaba un incremento arancelario esta semana.

La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, destacó que esta decisión demuestra el compromiso de la Administración republicana con los trabajadores estadounidenses y la clase media. Según Leavitt, se han visto avances en la dirección correcta, pero el Ejecutivo quiere asegurarse de que los pactos beneficien a su país.
La orden ejecutiva establece un procedimiento para determinar cuál de los múltiples aranceles se aplicará a un artículo cuando esté sujeto a más de uno de los gravámenes establecidos. Esto busca evitar la acumulación de aranceles sobre un mismo producto.

La medida se produce después de que Trump impusiera aranceles a México, Canadá y China en abril, con el objetivo de proteger la industria estadounidense y presionar a estos países para que cooperen en temas como la migración y el tráfico de drogas.
El gobierno estadounidense busca promover la industria nacional y proteger los intereses económicos del país a través de estos aranceles. Sin embargo, la medida ha generado preocupación entre algunos socios comerciales de Estados Unidos.

La decisión de retrasar el plazo arancelario hasta el 1 de agosto podría tener implicaciones significativas para la economía global y los acuerdos comerciales internacionales.