
El uso de servicios financieros móviles continúa transformando los hábitos de ahorro a nivel global, marcando un cambio significativo en la tendencia histórica de crecimiento lento en el ahorro formal. Según el informe de La base de datos Global Findex la mayor accesibilidad, conveniencia y asequibilidad de estas plataformas ha permitido que millones de personas realicen depósitos frecuentes de bajo valor, integrándose así al sistema financiero formal.
Según los datos más recientes, en 2024 el 40 % de los adultos en economías de ingreso bajo y medio ahorraba utilizando una cuenta formal, un incremento de 16 puntos porcentuales respecto a 2021. Este avance ha sido impulsado principalmente por el uso de dinero móvil y cuentas digitales, cuyo crecimiento continúa acelerándose.

En América Latina y el Caribe, así como en África subsahariana, el ahorro a través del dinero móvil aumentó más de 10 puntos porcentuales, alcanzando el 19 % y 23 % de los adultos, respectivamente. Mientras que en África subsahariana la mayoría de quienes ahorran formalmente lo hacen exclusivamente a través de dinero móvil, en América Latina predomina un modelo mixto que combina plataformas móviles con servicios bancarios tradicionales. Esta diferencia responde a la mayor integración entre ambos sistemas en la región latinoamericana.
África subsahariana registró en 2024 una tasa de ahorro formal del 35 %, respaldada por ejemplos como Senegal, donde el porcentaje de adultos que ahorra formalmente pasó del 46 % en 2021 al 67 % en 2024.
La región con mayor avance continúa siendo Asia oriental y el Pacífico, que no solo lidera en niveles de ahorro formal, sino que además experimentó el incremento más grande entre 2021 y 2024, con una subida de 20 puntos porcentuales, impulsada principalmente por el crecimiento registrado en China.
Pese al progreso global, persiste una brecha de género: aunque la proporción de mujeres que ahorran formalmente casi se duplicó hasta llegar al 36 %, los hombres siguen teniendo 7 puntos porcentuales más de probabilidad de ahorrar mediante mecanismos formales.
Estos datos reflejan una transformación profunda en el acceso financiero, impulsada por la digitalización y el auge de las soluciones móviles, que continúa ampliando oportunidades para poblaciones tradicionalmente excluidas del sistema financiero formal.
