
Anoche se celebró la Gala Nacional del Premio al Trabajo Decente, un evento que puso en el centro de la discusión económica la importancia de fortalecer las relaciones laborales como motor para el crecimiento productivo del país. En la ceremonia fueron reconocidos 68 empleadores que han demostrado un compromiso activo con prácticas que priorizan el bienestar de sus trabajadores, la igualdad de oportunidades y la construcción de entornos laborales sostenibles.
El Ministerio de Trabajo subrayó que el trabajo decente no solo es un principio de justicia social, sino también un factor determinante para la competitividad nacional. Empresas que garantizan protección social, diálogo permanente entre empleadores y trabajadores, y condiciones dignas de empleo tienden a registrar mayor productividad, menor rotación de personal y mejores indicadores de estabilidad económica.

Desde la llegada de la actual administración, encabezada por el ministro Rolando Castro, se ha reforzado la mediación entre trabajadores y empleadores, además de reactivar el Consejo Superior de Trabajo (CST), con el propósito de promover un clima laboral favorable a la inversión y la generación de empleo. La institucionalización del diálogo tripartito ha permitido resolver conflictos, mejorar procesos de negociación y fomentar prácticas responsables en los diferentes sectores productivos.

El reconocimiento otorgado a las 68 empresas llega en un momento clave, en el que la economía nacional busca consolidar un crecimiento sostenido. De acuerdo con las autoridades, fomentar el trabajo decente no solo fortalece el tejido empresarial, sino que se traduce en mayor competitividad para el país, atracción de inversión y una mejora directa en los ingresos de miles de familias.
La gala reafirmó que el desarrollo económico y el bienestar laboral son objetivos inseparables. Impulsar empresas que valoren el trabajo humano como un pilar estratégico es, según los organizadores, una ruta indispensable para construir un país con más oportunidades, justicia y dignidad.
