400 verificaciones y un preocupante 33% de irregularidades han encendido las alarmas de la Defensoría del Consumidor en El Salvador durante la temporada de Semana Santa. La institución, comprometida con proteger los derechos de los salvadoreños, ha desplegado un plan nacional de inspecciones para asegurar que los comercios, restaurantes y destinos turísticos cumplan con la normativa. Bajo la dirección de Ricardo Salazar, se han intensificado los controles en puntos clave del país, como Multiplaza en Antiguo Cuscatlán.

El 33% de los comercios verificados presenta algún nivel de incumplimiento, lo cual preocupa especialmente en sectores sensibles como supermercados, queserías y empresas de embutidos. La Defensoría ha detectado más de 70 balanzas mal calibradas, lo que afecta directamente el bolsillo del consumidor, pues podrían estar pagando más por menos producto. Estas anomalías ya están siendo procesadas y podrían derivar en multas de hasta 200 salarios mínimos.

La situación se torna aún más grave con el hallazgo de 10 establecimientos que ofrecían productos vencidos, entre ellos restaurantes, cocinas de hoteles y supermercados. Se encontraron productos caducados como pan, salsas, bebidas carbonatadas, ensaladas y hasta bebidas alcohólicas, representando un riesgo para la salud de los consumidores.

En total, han sido 150 productos vencidos los que se han identificado en lo que va de la vacación, siendo 100 de ellos encontrados en cocinas donde se preparan alimentos para el público. Esta situación ha motivado un refuerzo en las inspecciones, especialmente en los lugares donde se manejan alimentos que serán consumidos directamente.
La Defensoría del Consumidor reitera su compromiso de velar por los derechos de los ciudadanos, fortaleciendo sus controles durante esta temporada alta. Las autoridades instan a los consumidores a denunciar cualquier anomalía y recuerdan que su bienestar y economía son prioridad nacional.
