A casi un año de su ingreso al Instituto Global de Crecimiento Verde (GGGI, por sus siglas en inglés), El Salvador reafirma su compromiso con el desarrollo económico inclusivo y sostenible. Con una inversión de US$7 millones, el país ejecuta proyectos en conjunto con el GGGI, que apuntan a un balance entre crecimiento económico y sostenibilidad ambiental.
Esta semana, El Salvador participó en la 13ª Asamblea y el 17º Consejo del GGGI, celebrados en Corea del Sur. En estos encuentros, los Estados miembros evaluaron los avances y estrategias en temas de desarrollo verde. La colaboración con el GGGI ha sido clave para el Gobierno salvadoreño, en especial en áreas como la agricultura climáticamente inteligente y la restauración de tierras degradadas.
Adriana Mira, Viceministra de Relaciones Exteriores, destacó en un videomensaje la relevancia de esta relación para impulsar iniciativas con un impacto directo en las comunidades rurales. «El Salvador valora altamente su asociación con el GGGI. A través de esta colaboración, hemos logrado mejorar la seguridad alimentaria y generar oportunidades económicas para mujeres y jóvenes», afirmó.
La viceministra subrayó que estas acciones también fortalecen la resiliencia ambiental en áreas rurales, un objetivo prioritario para el Gobierno. En este contexto, el GGGI ha apoyado con transferencia de tecnología y maquinaria para asegurar el éxito de los proyectos.
El Salvador no solo aspira a consolidar esta relación, sino también a explorar nuevas áreas de colaboración en energías renovables y financiamiento verde. Mira enfatizó el interés del país en avanzar hacia la agrosostenibilidad y la adaptabilidad climática, áreas vitales para afrontar los desafíos ambientales.
Durante el evento, el embajador de El Salvador en Corea del Sur, Jaime López, presenció la bienvenida al nuevo Director General del GGGI, Sang-Hyup Kim, y agradeció a las autoridades salientes por su liderazgo.
Con el compromiso de mantenerse como un participante activo en el GGGI, El Salvador apuesta a que este esfuerzo compartido siga beneficiando a la población salvadoreña mediante la creación de empleos verdes y la protección del medio ambiente.