En 2024, el Grupo Banco Mundial alcanzó un récord de financiamiento climático de US$42,600 millones, un incremento del 10% respecto al año anterior. Este financiamiento se destina a esfuerzos para erradicar la pobreza y fomentar un planeta habitable, centrándose en la energía limpia, comunidades resilientes y economías sostenibles.
Durante la 28° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28), el Banco Mundial se comprometió a que el financiamiento climático represente el 45% del total en 2025. Este compromiso implica un esfuerzo coordinado de todas las instituciones del Grupo, aunque se reconoce que aún queda mucho por hacer para alcanzar los objetivos.
En el ejercicio de 2024, el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF) y la Asociación Internacional de Fomento (AIF) aportaron US$31,000 millones al financiamiento climático. De esta cantidad, US$10,300 millones se destinaron a proyectos de adaptación y resiliencia, lo que refleja un enfoque significativo en la preparación ante los impactos del cambio climático.
Por otro lado, la Corporación Financiera Internacional (IFC) contribuyó con US$9,100 millones, enfocándose en el financiamiento climático a largo plazo para el sector privado. Este papel es crucial para movilizar inversiones sostenibles que puedan fomentar la transición hacia economías más verdes.
El Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (MIGA) también tuvo un papel destacado, proporcionando US$2,500 millones en financiamiento climático, principalmente a través de seguros contra riesgos políticos y mejoras en el crédito, lo que facilita la inversión en proyectos sostenibles.
El financiamiento climático del Grupo Banco Mundial alcanzó el 44% del total de US$97,000 millones en 2024. Este esfuerzo conjunto demuestra el compromiso del Grupo para abordar la crisis climática y contribuir al desarrollo sostenible a nivel global.