Cerrar el año arrastrando deudas puede ser una carga emocional y financiera. Sin embargo, expertos coinciden en que existen estrategias prácticas para recuperar el control de las finanzas personales y comenzar el nuevo ciclo con mayor tranquilidad económica. La clave está en organizarse, priorizar y actuar con determinación.
El primer paso para acabar con las deudas es hacer un inventario detallado de ellas. Esto implica listar cada obligación, incluyendo montos, intereses y fechas de vencimiento.
Una vez identificadas, es importante priorizar las deudas según su urgencia o costo financiero. Los expertos sugieren utilizar estrategias como el método bola de nieve, que consiste en pagar primero las deudas más pequeñas, o el método avalancha, enfocado en aquellas con mayores intereses. Cualquiera de estas opciones permite avanzar de forma tangible y mantener la motivación.
Por último, ajustar el presupuesto personal es fundamental. Reducir gastos innecesarios, aumentar ingresos mediante actividades adicionales o ventas de artículos no esenciales, y evitar nuevas deudas son acciones que marcan la diferencia.
Aplicar estas estrategias no solo ayuda a liberarse de las deudas, sino que también fortalece los hábitos financieros para el futuro. Con disciplina y enfoque, es posible transformar una situación de estrés económico en una oportunidad de aprendizaje y crecimiento.