La economía digital basada en plataformas continúa su expansión en América Latina y el Caribe, impulsando nuevas dinámicas laborales y económicas en la región. Así lo confirma un reciente informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que evidencia un crecimiento sostenido del trabajo a través de plataformas digitales basadas en la web, con implicaciones directas en la empleabilidad, los ingresos y la estructura productiva regional.

El estudio, titulado Encuesta sobre trabajadores en plataformas digitales basadas en la web, analizó las experiencias de más de mil personas en 21 países, destacando que más del 50 % trabaja para contratantes internacionales, principalmente de Estados Unidos y Canadá. Este dato subraya el carácter transfronterizo del fenómeno y su potencial para generar divisas y ampliar el acceso a mercados globales desde economías emergentes.
La fuerza laboral identificada en estas plataformas es predominantemente joven, urbana y altamente calificada: la edad mediana es de 33 años y más del 50 % posee formación universitaria. Estas características revelan una oportunidad estratégica para América Latina y el Caribe de aprovechar su capital humano en el ecosistema digital global, especialmente en áreas como programación, diseño gráfico y entrenamiento de inteligencia artificial.

A pesar del potencial económico, el informe señala importantes retos estructurales. La mediana de ingresos por hora se sitúa en apenas US$2.57, y aunque el promedio asciende a US$5.48, la variabilidad es alta y persisten brechas significativas. Además, el 52% de los encuestados no depende exclusivamente de esta actividad para sostenerse económicamente, lo que evidencia la precariedad en la que aún opera gran parte de este segmento laboral.
Uno de los desafíos más urgentes es la escasa cobertura de protección social. Cerca del 40% de los trabajadores no cuenta con acceso a salud ni seguridad social, una realidad que exige respuestas urgentes desde la política pública. La flexibilidad que ofrece este tipo de empleo resulta atractiva para muchos, pero debe ir acompañada de condiciones mínimas que garanticen trabajo decente.

Este informe llega en un momento clave, ya que en junio de 2025 la OIT abordará en su Conferencia Internacional del Trabajo los marcos normativos del trabajo digital. La publicación servirá como insumo crucial para que los gobiernos, empleadores y trabajadores de la región participen de manera informada en la discusión sobre el futuro del empleo en la economía digital.