El crecimiento de la energía solar en El Salvador ha sido notable en los últimos años, alcanzando una participación del 7.31% en la matriz energética nacional. Este incremento es producto de la instalación de más de 60 parques solares en todo el país, destacando que se han aprobado 21 nuevas plantas, con una inversión total de US$152.6 millones, según Invest in El Salvador, con datos del Ministerio de Vivienda.
Entre las nuevas instalaciones solares figuran el Parque Solar Fotovoltaico San Isidro en Cabañas, la Planta Solar La Independencia 2 en La Libertad y La Esperanza en Cuscatlán. Además, destaca Talnique Solar, la primera planta solar estatal, con una capacidad de 17 megavatios (MW), inaugurada en diciembre del año pasado.
La capacidad instalada de estas plantas ha permitido que, en 2023, la producción de energía solar en El Salvador alcance los 539.07 gigavatios hora (GWh), una cifra considerable si se compara con los 94.8 GWh generados en 2017. Este avance subraya el creciente papel de la energía fotovoltaica en la transición hacia fuentes de energía más limpias y sostenibles.
Oscar Funes, vicepresidente de la Asociación Salvadoreña de Energías Renovables (ASER), mencionó que la reducción del 33% en los costos de instalación de tecnología solar ha sido un factor clave para el crecimiento del sector. Esta disminución ha incentivado a más empresas y entidades a apostar por la energía solar, además del interés de la banca de desarrollo en financiar proyectos verdes.
La multinacional AES El Salvador es una de las compañías más comprometidas con la expansión de la energía solar en el país, con la construcción de 34 plantas solares tanto para clientes comerciales como industriales. Su primera instalación fue inaugurada en 2015 en Moncagua y desde entonces ha seguido invirtiendo en este tipo de proyectos.
Con estas inversiones, el país no solo diversifica su matriz energética, sino que también mejora su posición regional en el aprovechamiento de energías renovables. Según los datos de ASER, la tendencia hacia la integración de sistemas solares con baterías augura un futuro prometedor para el sector, permitiendo el aprovechamiento del recurso solar tanto de día como de noche.
Las proyecciones indican que las inversiones continuarán en ascenso, lo que impulsará aún más el uso de la energía solar en El Salvador, favoreciendo el medio ambiente y reduciendo la dependencia de fuentes de energía convencionales.