La imposición de aranceles recíprocos, encabezada por Estados Unidos hacia más de 70 países, se ha convertido en uno de los principales factores de riesgo para la economía global, advirtieron la directora del FMI, Kristalina Georgieva, y el presidente del Banco Mundial, Ajay Banga. Durante conferencias previas a las Reuniones de Primavera, ambos líderes coincidieron en que estas medidas están generando incertidumbre para la inversión y frenando el flujo de las cadenas de suministro.

Georgieva alertó que el aumento de barreras comerciales ha elevado la volatilidad financiera y amenaza con debilitar aún más las perspectivas de crecimiento global. Aunque no prevén una recesión, sí anticipan una desaceleración económica más profunda si la incertidumbre persiste.
El FMI tenía estimado un crecimiento mundial de 3.3%, pero este podría ajustarse a la baja cuando el próximo martes se actualicen las expectativas en el informe World Economic Outlook. La directora del organismo subrayó que mientras más dure la incertidumbre, mayor será el impacto económico global.

Por su parte, Banga hizo un llamado a la negociación comercial multilateral y destacó que los países más abiertos históricamente muestran mayor resistencia ante crisis económicas. Advirtió que las economías emergentes, más dependientes del comercio, están siendo las más afectadas.
Ambos organismos destacaron que las tensiones entre potencias como Estados Unidos, China y la Unión Europea han dejado atrapados a países más pequeños, aumentando los riesgos para los modelos económicos basados en exportaciones y afectando directamente la productividad global.

Ante este panorama, FMI y Banco Mundial preparan una serie de herramientas para mitigar los efectos de las disrupciones comerciales y sostener el crecimiento. Además, recomiendan a los países fortalecer sus mercados internos y la competencia mientras se redefinen las reglas del comercio internacional.