
En los mercados del país, el espíritu navideño ya se siente, pero también los efectos directos de la inflación, que ha provocado un incremento generalizado en los precios de los alimentos que conforman la canasta básica. Las familias que preparan cenas y celebraciones han comenzado a notar que sus compras habituales ahora cuestan más.

Productos esenciales como la cebolla y el tomate han experimentado aumentos significativos. Comerciantes afirman que, mientras antes se podían obtener cinco unidades por un dólar, ahora solo se reciben tres. Asimismo, el tomate se cotiza entre US$25 y US$30 el quintal, y la cebolla ronda los US$20 por quintal, valores que reflejan el ajuste inflacionario.

El alza en los precios de los alimentos golpea directamente el presupuesto de los hogares salvadoreños, que ya destinan una parte considerable de sus ingresos a la compra de la canasta básica.

Mientras continúe la temporada festiva, los expertos recomiendan comparar precios, evitar compras impulsivas y planificar los gastos, como medidas para enfrentar los efectos inmediatos de la inflación sobre la mesa familiar.
