
El Salvador avanza en la modernización de su sistema financiero con la próxima Ley de Fondos de Inversión Privados Alternativos (PAIF), que busca atraer grandes capitales hacia proyectos innovadores y de alto impacto. Este nuevo marco regulatorio, respaldado por la Constitución, permitirá la creación y operación de fondos privados destinados a inversionistas sofisticados, quienes cuentan con la experiencia y capacidad para asumir riesgos complejos.

La normativa ofrecerá mayor certeza jurídica y flexibilidad en inversiones en sectores como tecnología digital, energías renovables y desarrollos inmobiliarios, posicionando al país como un destino atractivo para capitales modernos y estratégicos. Además, la Superintendencia del Sistema Financiero fortalecerá la supervisión con análisis de riesgos macroeconómicos para asegurar la estabilidad.

Desde 2021, la confianza en El Salvador se refleja en un crecimiento histórico en la constitución de sociedades, impulsado por un clima de seguridad favorable, lo que demuestra el potencial para consolidar el país como un centro financiero alternativo en la región. La ley establece requisitos claros para sociedades administradoras con capital mínimo y estrictos controles, garantizando transparencia y confianza para fomentar el desarrollo económico sostenible y la diversificación de inversiones en El Salvador.