
La residencia de la artista colombiana Shakira en San Salvador se perfila como un importante motor económico para El Salvador, con un impacto estimado de US$25 millones, derivado de tres conciertos programados para los días 12, 14 y 15 de febrero de 2026.

El evento reunirá a aproximadamente 82,000 asistentes, de los cuales el 12 % serán visitantes extranjeros, lo que impulsará de forma directa el consumo en sectores como hotelería, transporte, alimentación y comercio. Como resultado, se proyecta una ocupación hotelera del 100 % durante las fechas de los conciertos, reflejando el efecto dinamizador del espectáculo sobre la actividad turística.

Además del impacto en el consumo, la residencia generará cerca de 4,000 empleos directos y 7,000 indirectos, beneficiando a trabajadores vinculados a la producción de eventos, logística, seguridad y servicios turísticos. Este movimiento económico confirma el potencial de la industria del entretenimiento como un generador relevante de ingresos y empleo.

La realización de estos conciertos consolida a El Salvador como un destino atractivo para eventos de gran escala, capaces de movilizar inversiones, atraer visitantes internacionales y contribuir de manera significativa al crecimiento económico del país.
