La región de América Latina y el Caribe desacelerará su ritmo de crecimiento en 2022 a 2.1%, luego de crecer 6.2% promedio el año pasado, según nuevas proyecciones entregadas el pasado 12 de enero por la CEPAL.
Esta desaceleración sucede en un contexto de importantes asimetrías entre los países desarrollados, emergentes y en desarrollo sobre la capacidad de implementar políticas fiscales, sociales, monetarias, de salud y vacunación para una recuperación sostenible de la crisis desatada por la pandemia de COVID-19.
Así lo señala la CEPAL en su informe anual Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe 2021.
Según el reporte, la región enfrenta un 2022 muy complejo: persistencia e incertidumbre sobre la evolución de la pandemia, fuerte desaceleración del crecimiento, se mantienen la baja inversión, productividad y lenta recuperación del empleo, persistencia de los efectos sociales provocados por la crisis, menor espacio fiscal, aumentos en las presiones inflacionarias y desequilibrios financieros.
De acuerdo con la CEPAL, el crecimiento de 2.1% promedio esperado refleja una alta heterogeneidad entre países y subregiones: El Caribe crecerá 6.1% (excluyendo Guyana), América Central crecerá 4.5%, mientras que América del Sur lo hará en 1.4%.