Dino Safie, fundador de Solidaritón, dijo que los US$20,000 obtenidos con el premio marcaron un antes y un después para la organización. “Se materializa el sueño que teníamos, que nos hubiera costado año lograr. Pasamos de tener unas 20 personas beneficiadas, a 87 al día de hoy, y vamos a llegar a 300”, aseguró.

“El de Solidaritón es un ejemplo de lo que nos motiva a seguir entregando este premio año con año: la certeza de que hay cientos, sino miles de salvadoreños que trabajan día con día para transformar sus comunidades, a la sociedad, al país. Ellos son especialistas en lo que hacen y nosotros les damos este refuerzo para que puedan hacerlo mejor, con mayor alcance”, dijo Fernando Kriete, secretario de la Junta Directiva de la Fundación Gloria Kriete.

La modalidad de emprendimiento social del Premio Ayudando a Quienes Ayudan busca impulsar el trabajo de emprendedores sociales que aplican un modelo de negocio a la generación de impacto social, innovando para crear soluciones sostenibles. Solidaritón es un proyecto surgido durante la pandemia de COVID-19, cuando se suspendió la circulación de transporte colectivo, y Safie tuvo la iniciativa de facilitar transporte gratuito para llevar a pacientes de quimioterapia, diálisis y Teletón, a recibir sus tratamientos.

Iniciaron con vehículos rentados, y aunque pensaron que la iniciativa se suspendería una vez regresara el transporte público, decidieron mantener el programa. El reto era cómo pagarlo, a ese punto habían visto que las donaciones no eran constantes, que no se tendría la misma cantidad de ayuda que cuando lanzaron el proyecto. “Se me ocurrió que, si bien no todo mundo da dinero, sí era más fácil que dieran ropa. Reunido con FUSATE me comentaron que tenían también ropa, me la donaron, y allí empezamos a agarrar la ropa y a darle un segundo uso, creando un modelo económico: un bazar donde recibimos los donativos de ropa en buen estado, y venderla”, dijo Safie.

Este modelo de negocios, que les ha permitido ser autosostenibles, se ha expandido a sus beneficiarios, a quienes les arman fardos para que puedan generar un ingreso, vendiendo la ropa. Esta se les da primero en consignación, y luego pagan un valor simbólico. Así fueron sumando socios y recolectando ropa. Con el dinero obtenido se pagaba el proyecto.

“Tras el proyecto de la FGK invertimos en levantar dos bazares físicos bien hechos, uno en Izalco y otro en San Salvador. Luego empezamos a invertir en fardos de ropa premium, que es una mezcla entre ropa usada y nueva, y esto nos ha permitido que nuestros socios solidarios, los beneficiarios que venden la ropa, tengan un mejor producto y más variedad, y hemos crecido considerablemente en la cantidad de personas que se benefician de esto. Ya tenemos una socia que compra US$700 al mes”, detalló Safie.

Proyectos como el de Solidaritón, en los que el modelo de negocios responde a un objetivo social y no de lucro, que les permite ser sostenibles, es de gran interés para la Fundación Gloria Kriete, aseguró Fernando Kriete, secretario de la Junta Directiva de la FGK. “Queremos apoyar estos modelos de negocios sostenibles, que generan ingresos para expandir el impacto social de sus actividades. Creemos que, viendo estos ejemplos, otras empresas y emprendimientos se interesarán en este enfoque del Triple Bottom Line, es decir de medir no solamente los resultados económicos, sino también el impacto de su actividad en el medio ambiente y en la sociedad”, comentó Kriete.

Con el premio Ayudando a Quienes Ayudan pasaron además de rentar los vehículos, a pagar la prima de un carro propio. “Queremos llegar a tener 300 socios activos, actualmente tenemos 190 pero son 87 los activos mes a mes. También queremos tener dos carros trabajando de lunes a sábado, transportando a tres pacientes por día”, agregó.

Entre sus proyectos está también abrir dos bazares adicionales. Están evaluando los lugares donde se puede hacer. Con cuatro locales y 300 socios esperan también duplicar la cantidad de beneficiarios con el transporte, para llegar a 67 para junio de este año.

“Una de las cosas que más me marcó fue el discurso de Fernando Kriete en la premiación, cuando dijo que ellos aprendieron que había personas que tenían años trabajando en proyectos que transformaban las oportunidades, y que ellos habían entendido que era mejor apoyar a esas personas. Me marcó porque me di cuenta que cada proyecto está haciendo un cambio estructural importante en el país, y cada uno necesita apoyo y financiamiento. El Premio Ayudando a Quienes Ayudan es la inyección más importante para las organizaciones que están haciendo estos cambios estructurales en el país”, aseguró Safie.

“Cada uno de los ganadores del premio edición 2021 está haciendo cambios importantes. Las úlltimas semanas, hemos visitado diversos proyectos y hemos visto como estas inversiones sociales están cambiados las vidas de comunidades enteras; estamos viendo como los sueños se estan haciendo realidad por medio del trabajo de personas comprometidas en el cambio que desean ver” afirmó Juana Jule, Directora Ejecutiva de FGK.

El Premio Ayudando a quienes Ayudan nació hace 16 años con el propósito de reconocer el esfuerzo de quienes, desde diferentes ámbitos de actuación, realicen acciones dirigidas a aportar y sumar esfuerzos para ayudar a otras personas y contribuir a un mundo más justo y solidario.