Esta inversión permitirá apostar por soluciones a cuestiones medioambientales, de inequidad y de salud planteadas por un máximo de 75 empresas deeptech de la región.
Se espera que aproximadamente la mitad de su portafolio se centre en compañías que aborden problemas relacionados con el cambio climático y la otra mitad en aquellas centradas en temas de salud.
Ambos sectores demandan en nuestra región nuevas formas de producción y consumo a través de avances científicos o tecnológicos significativos.
El modelo de inversión de GridX II pretende actuar como puente entre científicos y emprendedores para que conjuntamente creen e inviertan en empresas basadas en la ciencia al albur de una nueva ola de innovación marcada por la bio-revolución, que puede tener un impacto significativo en las economías y vidas de las personas, desde salud a la agricultura, bienes de consumo, energía y materiales.
Deeptech es la tecnología profunda o tecnología dura es una clasificación de organización, o más típicamente una empresa nueva, con el objetivo expreso de proporcionar soluciones tecnológicas basadas en desafíos científicos o de ingeniería sustanciales.