En las últimas semanas, los responsables de estos ataques se han valido de la buena fe de sus clientes; a través de correos, o mensajes por WhatsApp, han circulado adjuntos con virus maliciosos, enlaces o links a páginas web falsas, donde han logrado obtener información personal y confidencial, que posteriormente están utilizando para cometer los delitos.

“Actualmente, hemos logrado contener un sinnúmero de modalidades de fraude, el equipo de ciberseguridad ha desmantelado más de 1,300 sitios web dedicados a esta modalidad de estafa. A pesar del esfuerzo, cerca de mil clientes han denunciado un robo a causa de estos fraudes; y aunque esto representa menos del 1% de nuestras transacciones, nos sentimos muy preocupados por la situación que afecta la economía de las familias salvadoreñas”, comentó Pablo Rivas, Director de Servicios Administrativos de Bancoagrícola.

El banco ha logrado desmantelar los sitios fraudulentos gracias a sus equipos especializados   herramientas con que cuenta la entidad para hacerle frente a la ciberdelincuencia, así como al oportuno reporte de algunos de sus clientes.

Miguel Guemez, Gerente de Seguridad Corporativa de Bancoagrícola, confirma que la actitud de los clientes está del lado de denunciar el fraude. “La educación financiera ha sido fundamental, pues algo positivo que hemos notado es que los salvadoreños han tomado una actitud de denuncia ante esta situación; lo cual es producto de las campañas que hemos realizado”, dijo el gerente.

Los usuarios del sector financiero a nivel mundial siguen siendo afectados por la ingeniería social, mecanismo por el que se obtiene información confidencial a través de llamadas telefónicas falsas, manipulación de redes sociales, mensajes de texto (smishing) y correos electrónicos falsos (phishing). También, por medio de amenazas cibernéticas como el malware, tipo de programa malicioso que infecta computadores, celulares y tablets, entre otros.

Todas son modalidades con el mismo objetivo: robar la información financiera para luego usarla en la materialización de fraudes financieros. 

Frente a esta situación, el banco ha liderado una importante campaña con mensajes de advertencia para prevenir las estafas que incluyen: recomendaciones para prevenir que los clientes expongan información sensible desde sus teléfonos y computadores personales.

La institución ha comprobado que esta red de estafadores son personas ajenas al banco. También aclaró, frente a los señalamientos sobre posible violación de su seguridad que, la seguridad de sus sistemas no ha sido vulnerado, y que cuenta con controles internos basados en las mejores prácticas internacionales. Además, el banco es constantemente supervisado por las autoridades.

“Reitero a todos nuestros clientes que contamos con la solidez de ser el mayor banco del Sistema Financiero y somos parte de uno de los grupos financieros más importantes en Latinoamérica. por

eso con total confianza, podemos garantizar la seguridad de cada depósito y ahorro que nos ha sido confiado”, agregó Rivas. “Nosotros estamos colaborando con las autoridades en la persecución del delito. Invitamos a todas las personas afectadas con estas estafas a contactarnos para contribuir con estas denuncias a efecto que las autoridades delimiten responsabilidades”.

Pablo Rivas también recordó que en septiembre 2016 se inauguró el Centro de Operaciones de Bancoagrícola, con una inversión de $55 millones para el país, lo cual marcó un hito que consolida la confiabilidad en las operaciones del banco. Esto garantiza que los más de 1.3 millones de clientes están protegidos por tecnología del más alto nivel que permite transacciones más rápidas, eficientes, sobre todo seguras.

“Aprovechamos este espacio para recordarle a las personas, como lo hemos dicho en reiteradas ocasiones, que Bancoagrícola nunca enviará enlaces para actualizar tus contraseñas. Si tienes alguna denuncia que realizar, nos pueden llamar al teléfono 2210-0000, opción 9, para atenderlas de forma expedita” concluyó Guemez.

Adicionalmente, los voceros recomendaron a los clientes efectuar frecuentemente diagnósticos con antivirus en sus teléfonos y computadores personales para descartar cualquier programa malicioso de robo de contraseñas.