La compañía que inició como un emprendimiento el 23 de enero de 1998 se ha convertido hoy por hoy en todo un referente a nivel mundial, gracias al espíritu y visión de su fundador y CEO, Ing. Axel Rivera, quien construyó por sí mismo las primeras máquinas artesanales para el reciclaje, y luego logró distintas inversiones en innovación, siendo la más importante la de dos millones de dólares en equipos tecnológicos en 2021, adquiridos a la empresa líder a nivel mundial, la austríaca Erema Group Pure Loop.

Es así como, de mil libras de materiales reciclados diarios, la compañía pasó a reciclar dos mil libras por hora. Al cabo del año pasado, reciclaron 30 millones de libras de polietileno.

“Hace 25 años identifiqué una oportunidad de mercado y comenzamos como un emprendimiento. Fabricamos una máquina y eso nos llevó a producir productos terminados con la materia prima del reciclaje, así fuimos evolucionando para hacer empaques de alimentos y bolsas para distintos usos, que hoy también incluye la línea de productos biodegradables conocida como LivePack”, aseguró el Ing. Axel, Rivera, CEO de Foam Industrial,

La empresa con sede en el municipio de Soyapango, en San Salvador, y cobertura a nivel centroamericano genera más de 500 empleos directos y brinda fuentes de ingresos dentro de una cadena de sostenibilidad que incluye a distintos recolectores y recicladores.

“Vemos una gran oportunidad que existe en el país poder reconvertir los desechos en materias primas que se revalorizan y se convierten en nuevos productos”, afirmó la Licenciada. Gabriela Rivera, vicepresidenta de la empresa.

“Sabemos que falta una cultura de reciclaje y la clave es la educación. Un pilar muy importante es nuestra campaña #LaEducaciónEsLaSolución, con la que hemos impartido charlas de sensibilización a más de 8,000 estudiantes en colegios, escuelas y universidades, con el propósito de que todos estemos en la cultura de reciclaje”, apuntó.

Como parte de sus programas de responsabilidad social, Foam Industrial también implementa junto a sus colaboradores actividades de reciclaje inclusivo, de la mano de Fundemas, así como proyectos articulados con entidades de Gobierno, para colocar eco estaciones en puntos turísticos, con el objetivo de que los visitantes puedan separar sus desechos debidamente.