El análisis realizado también pone de manifiesto que hay pocos consejos de administración con suficiente conocimiento de las tecnologías digitales y con experiencia sobre las dificultades organizativas y humanas a la hora de implantarlas.
En este sentido los autores subrayan que “esto explica la falta de conciencia sobre su importancia y del riesgo de disrupción que sufre un negocio que no las considera clave para la competitividad futura. Solo un 55% de los encuestados da una alta prioridad a la estrategia en las reuniones del Consejo y no supera el 17% los que afirman que esto haya producido algún cambio en la organización del consejo”.
La investigación también muestra que los consejos consideran solo medidas tácticas y de corto plazo sobre la transformación digital y la gran mayoría delegan tanto la estrategia y como la transformación digital a la alta dirección; esto ocasiona que los efectos sobre el negocio son superficiales y con bajo retorno.
Entre las soluciones planteadas por los autores del estudio destaca la apuesta por “desarrollar una estrategia digital de transformación, gobernada por el Consejo, que incluya los aspectos tecnológicos, organizativos y culturales durante su implantación, lo que debería ser el cometido central de la gobernanza de las PYMES”.