
El precio de Bitcoin vivió este inicio de noviembre de 2025 su peor caída desde junio, perdiendo la barrera psicológica de los US$100,000 dólares y acumulando una contracción superior al 6% en menos de 24 horas. Este desplome sacudió a todo el mercado cripto y encendió las alertas entre inversores y analistas.
Bitcoin se derrumbó hasta los US$99.933 dólares, el nivel más bajo desde junio de este año, y cerró el día estabilizado en torno a los US$100.460 dólares, tras iniciar la jornada en US$104.000. Esta brusca corrección representa una pérdida de más del 6% en un solo día y de más del 3% en apenas una semana.
Factores detrás del desplome
Las declaraciones de Jerome Powell, presidente de la Reserva Federal estadounidense, sobre el posible mantenimiento de las tasas de interés en niveles elevados y preocupaciones sobre la inflación contribuyeron decisivamente al clima de incertidumbre.
Factores macroeconómicos y tensiones geopolíticas presionaron a los activos de riesgo, afectando a Bitcoin y otras criptomonedas.
Se registraron liquidaciones masivas de posiciones largas en exchanges como Binance y Bybit, lo que generó un efecto dominó y aceleró la caída.
El sentimiento del mercado viró radicalmente: el índice de “miedo y codicia” se desplomó a un nivel de “miedo extremo”, con inversores retirando posiciones y vendiendo de emergencia.

Contexto técnico y perspectivas
Los soportes técnicos clave fueron perforados. La media móvil de 200 días, alrededor de los 107.000 dólares, fue superada a la baja; los analistas advierten que, si no se recupera, el próximo soporte relevante podría ser la zona de 94.200 dólares.
Impacto en el mercado cripto
La capitalización total del mercado cayó más de 5,5% y el volumen de operaciones aumentó un 22%, reflejando el pánico vendedor. Esta corrección de Bitcoin arrastró al resto de las criptomonedas y consolidó el sentimiento de cautela en todo el sector.
Histórico y comparación
La caída de noviembre cortó abruptamente la brecha alcista de 2025 y recuerda caídas históricas previas, como la corrección de noviembre de 2018 tras un octubre negativo. Las expectativas para el cierre del año se mantienen inciertas y los analistas advierten sobre la posibilidad de una consolidación prolongada si no se encuentra pronto un “suelo” en la cotización.

