El Salvador ha dado un paso firme hacia la modernización de su administración tributaria y aduanera, con el objetivo de mejorar la recaudación y reducir la evasión fiscal. Gracias a un proyecto de digitalización impulsado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el país ha integrado herramientas tecnológicas que permiten una gestión más eficiente de los impuestos. Uno de los principales avances ha sido la implementación de la factura electrónica, la cual ha facilitado el proceso de reporte y pago de impuestos para empresas de todos los tamaños.
Esta herramienta no solo permite una mejor supervisión, sino que también agiliza la verificación por parte de la administración tributaria, al automatizar el proceso completo. Marvin Sorto, Director de la Dirección General de Impuestos Internos, destacó que la plataforma digital permite a las empresas gestionar sus finanzas e impuestos en tiempo real.
Hasta septiembre de 2024, un total de 6,897 contribuyentes ya habían adoptado esta solución, contribuyendo a una reducción significativa en el uso de papel y recursos naturales. El gobierno estima que el proyecto evitó la tala de 29,157 árboles y ahorró 208.6 millones de litros de agua, promoviendo así la sostenibilidad ambiental.
Para facilitar esta transición digital, el proyecto incluyó la actualización de la legislación y de la infraestructura digital y física del país. Esta reforma abarcó la base de datos de registro de contribuyentes, aumentando la capacidad de control y análisis del Ministerio de Hacienda. Ana Cristina Calderón, jefa del equipo del proyecto, enfatizó el enfoque ciudadano del proyecto, diseñado para acercar a los contribuyentes a la administración tributaria y facilitar el cumplimiento.
Esta transformación ha tenido un impacto positivo en la recaudación del Impuesto al Valor Agregado (IVA), que pasó de representar el 3.5% del PIB en 2017 al 8.7% en 2023, según el Ministerio de Hacienda.
Los contribuyentes también han notado la mejora en los centros de atención exprés, donde se han ampliado y modernizado las instalaciones para ofrecer un ambiente más cómodo y accesible. Félix Alfredo Pineda, usuario del Centro Exprés de San Vicente, valoró las condiciones del centro, señalando que ahora puede realizar sus trámites de manera más rápida y cómoda gracias a los servicios en línea.
El Ministerio de Hacienda también ha fortalecido su infraestructura tecnológica para soportar la digitalización del sistema tributario. Esto incluye una red de servidores modernizada y la integración de bases de datos de diferentes direcciones fiscales, lo que ha permitido una mayor disponibilidad de servicios en línea, especialmente durante los picos de demanda en fechas de vencimiento de impuestos.
En términos de recaudación, los avances tecnológicos han ayudado a incrementar los ingresos tributarios en US$2 mil millones entre 2020 y 2023. Con estos esfuerzos, el país ha logrado que los ingresos fiscales alcancen el 20% del PIB. Este crecimiento refleja una mayor efectividad en la aplicación de la normativa tributaria y en la supervisión del cumplimiento de los contribuyentes, de acuerdo con el ministro de Hacienda, Jerson Posada.
La digitalización ha permitido reducir los tiempos de atención y ha mejorado la eficiencia en los procesos de supervisión fiscal, contribuyendo a la disminución de la evasión. “Hemos logrado importantes avances en el fortalecimiento de las finanzas públicas. Ahora, debemos continuar en la senda de modernización digital para mantener el crecimiento de la recaudación y eliminar la brecha de evasión fiscal”, señaló Posada, reafirmando el compromiso de El Salvador con la transformación digital de su sistema tributario.