El Salvador emerge como un actor clave en el panorama económico centroamericano, mostrando un dinamismo impresionante según la reciente Reporte Mensual de Actividad Económica del SECMCA. La actividad económica del país, medida por el Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE), registró una notable variación interanual del 5.33%. Este crecimiento supera el promedio regional, destacando el progreso económico salvadoreño y consolidando su posición como uno de los motores de la región.

La actividad económica de la región de Centroamérica y República Dominicana (CARD), registró una variación interanual de 5.10%; incrementando en 2.88 puntos porcentuales, respecto al mes anterior.
El repunte económico de El Salvador se sustenta en el vigor de varios sectores. Las actividades financieras y de seguros experimentaron un crecimiento excepcional del 7.0%, reflejando la solidez y confianza en el sistema financiero. De manera similar, las actividades inmobiliarias sorprendieron con un incremento del 8.8%, señalando un mercado en expansión y una creciente inversión en el sector. Estos datos subrayan la diversificación y resiliencia de la economía salvadoreña.

El sector de la construcción con un asombroso crecimiento del 29.6%, es un pilar fundamental en esta expansión. Este aumento exponencial no solo genera empleo y dinamiza la inversión, sino que también indica un robusto desarrollo de infraestructura y proyectos en el país. El auge de la construcción es un claro indicador de la confianza en las perspectivas futuras de El Salvador, atrayendo tanto inversión local como extranjera.
Además, las industrias manufactureras, tras un periodo desafiante, mostraron una recuperación positiva con un crecimiento del 4.1%. Este repunte es crucial para la generación de valor agregado y empleo, fortaleciendo la base productiva del país.
El desempeño general de El Salvador en marzo de 2025 posiciona al país con una perspectiva económica favorable, con sectores clave mostrando un vigor renovado que impulsa el crecimiento y el desarrollo.