El Instituto Salvadoreño de Turismo (ISTU) reportó ingresos por más de US$1,000 millones en divisas generadas por turistas internacionales hasta noviembre de 2024. Según la presidenta del ISTU, Eny Aguiñada, el país ha recibido 3.5 millones de visitantes internacionales en lo que va del año, logrando el 93% de la meta propuesta de 3.8 millones de turistas para el cierre del año. Estos resultados reflejan el impacto positivo de las estrategias implementadas para posicionar a El Salvador como un destino turístico atractivo en la región.
Para el período comprendido entre el 21 de diciembre de 2024 y el 2 de enero de 2025, el ISTU prevé la llegada de 125,000 visitantes internacionales, quienes dejarían alrededor de US$125 millones en divisas. Este flujo de turistas coincide con las festividades de fin de año, un momento clave para el turismo salvadoreño. Además, se espera que el turismo interno crezca con la proyección de 1.2 millones de visitas a parques, playas públicas y sitios turísticos, un incremento del 5% respecto al año anterior.
El crecimiento del turismo no solo beneficia al sector privado, sino que también dinamiza las economías locales en las comunidades que dependen del turismo. La funcionaria destacó la importancia de seguir mejorando la infraestructura turística y de promover experiencias únicas que motiven a los visitantes a regresar. «Estamos trabajando para cerrar el año con resultados históricos en el sector», aseguró Aguiñada.
El aumento en la llegada de turistas internacionales está ligado al éxito de campañas de promoción que destacan los atractivos naturales, culturales y gastronómicos del país. Además, la seguridad y la mejora en la conectividad aérea han sido factores determinantes para atraer a más visitantes. Estas acciones han permitido posicionar a El Salvador como un destino competitivo en Centroamérica.
El ISTU también trabaja en alianzas estratégicas para diversificar la oferta turística, lo que incluye eventos culturales y actividades recreativas en sitios emblemáticos. Con estas iniciativas, El Salvador no solo busca superar las expectativas para el cierre de 2024, sino también establecer bases sólidas para un crecimiento sostenido del turismo en los próximos años.