El Salvador avanza en la modernización de su sistema financiero con la implementación de tecnologías emergentes. La Comisión de Tecnología, Turismo e Inversión de la Asamblea Legislativa ha iniciado el estudio de reformas a la Ley de Regulación de los Servicios de Información sobre el Historial de Crédito de las Personas, con el objetivo de fortalecer la seguridad y eficiencia de los servicios bancarios mediante la adopción de almacenamiento en la nube.

Las modificaciones permitirán que las agencias de información financiera tengan respaldo de datos en una infraestructura digital avanzada, garantizando la continuidad operativa y mejorando la protección de la información de los usuarios. Además, el Banco Central de Reserva (BCR) y la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF) tendrán acceso irrestricto a los sistemas de almacenamiento, asegurando que se cumplan estándares internacionales de ciberseguridad.
Este avance representa una oportunidad para dinamizar el ecosistema financiero salvadoreño, permitiendo mayor eficiencia en los servicios y reduciendo costos operativos. Según la gerente de Estabilidad Financiera del BCR, Guadalupe Escobar de Hernández, la modernización digital del sistema bancario ha permitido innovaciones como la apertura de cuentas a través de dispositivos móviles, facilitando la inclusión financiera y la competitividad del sector.

A nivel internacional, reguladores de países como Argentina, Colombia y Brasil han implementado normativas que regulan el uso de servicios en la nube para fortalecer la infraestructura tecnológica del sector financiero. En El Salvador, las reformas permitirán que las entidades bancarias aprovechen estos avances, impulsando la adopción de tecnologías como inteligencia artificial y automatización de procesos, lo que generará mayor seguridad y eficiencia en la gestión financiera.
La Superintendencia del Sistema Financiero destacó que el uso de la nube facilitará estrategias de continuidad operativa, escalabilidad y ciberseguridad, garantizando que los servicios financieros sean más accesibles y seguros para la población. Además, permitirá a las instituciones responder con rapidez ante eventos críticos, asegurando la estabilidad del sistema financiero.

Con estas reformas, El Salvador se posiciona a la vanguardia de la modernización económica y tecnológica, fortaleciendo su entorno financiero digital y promoviendo un desarrollo sostenible basado en la innovación y la seguridad de los datos.
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