Según el reporte regional de la Secretaría del Consejo Monetario Centroamericano (SECMCA), las remesas familiares alcanzaron un total de US$4,052.0 millones, lo que representa un incremento del 0.8% respecto al año anterior. Este crecimiento, de US$33.3 millones, refleja la estabilidad en el flujo de remesas hacia la región.
Sin embargo, durante el primer semestre del año, se observó una disminución en los envíos durante el mes de junio. En ese mes, se reportó un monto de US$661.6 millones, una caída del 3.7% o US$25.2 millones con respecto al mismo mes del año pasado. Este descenso puntual no parece afectar la tendencia positiva en el acumulado anual.
El informe destaca que, a pesar de la disminución en junio, el comportamiento general de las remesas sigue siendo favorable para la economía de los países centroamericanos. Las remesas continúan siendo una fuente clave de ingresos para las familias, contribuyendo significativamente a la estabilidad económica.
Los expertos señalan que el crecimiento acumulado refleja la resiliencia de las familias centroamericanas en el contexto global actual. Las remesas no solo ayudan a mejorar las condiciones de vida, sino que también impulsan el consumo y la inversión en sectores clave de la economía local.
Con una cifra de US$4,052 millones, las remesas muestran un impacto positivo en la región, y se espera que sigan jugando un rol crucial en el desarrollo económico de Centroamérica, a pesar de fluctuaciones puntuales en los flujos mensuales.