La ONU Comercio y Desarrollo (UNCTAD), destaca la urgencia de una cooperación fiscal internacional más inclusiva y transparente para atender las necesidades del Sur global. Según el Informe sobre Comercio y Desarrollo 2024, solo 22 países en desarrollo cuentan con grado de inversión, enfrentando dificultades para acceder al capital y un déficit de inversión crítico para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
La crisis financiera global, el alto costo de los préstamos y la limitada financiación pública agravan este panorama. Para revertir esta tendencia, la UNCTAD propone reformar la arquitectura financiera internacional, ampliando el espacio fiscal mediante liquidez flexible, reestructuración de deuda y mayores préstamos para el desarrollo.
Además, se subraya la necesidad de movilizar ingresos nacionales, abordando la evasión fiscal, el arbitraje corporativo y los flujos financieros ilícitos, que afectan desproporcionadamente a los países de ingresos bajos. Entre 2015 y 2019, el 40 % de los beneficios de las multinacionales se trasladaron a paraísos fiscales, reduciendo los ingresos tributarios globales en un 10 %.
La propuesta de una Convención Marco de la ONU sobre Cooperación Tributaria Internacional busca garantizar igualdad en la toma de decisiones fiscales. Esta plataforma global podría cerrar brechas en el sistema financiero y fortalecer la movilización de recursos nacionales, priorizando la inclusión y transparencia.
Para lograrlo, se requiere un diálogo efectivo entre países del Norte y el Sur, abordando desigualdades fiscales y riesgos asociados a regímenes diferenciados. Este esfuerzo permitirá a los gobiernos financiar inversiones críticas y reducir la dependencia de recursos externos.
La reforma tributaria internacional no solo configurará el futuro de la cooperación fiscal, sino que sentará las bases de una gobernanza financiera equitativa, esencial para el desarrollo sostenible global.