
La Cofradía de las Flores y las Palmas de Panchimalco ha sido oficialmente inscrita en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, tras la decisión adoptada por el Comité Intergubernamental para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial que se reunió en Nueva Delhi, India, anunciada este 10 de diciembre.
Esta inscripción constituye la primera declaratoria de patrimonio cultural inmaterial de la UNESCO para El Salvador, inscribiéndose en la historia de nuestro país y reconociendo la riqueza, profundidad y vitalidad de nuestras tradiciones vivas.

La gestión de la nominación, que llevó dos años, fue realizada por el Ministerio de Relaciones Exteriores, a través de la Embajada en Francia y de la Delegación Permanente ante la UNESCO, y el Ministerio de Cultura, cuyo esfuerzo conjunto permitió la elaboración de un expediente sólido, fiel y plenamente alineado con la convención e 2003.
“Como Cancillería estamos agradecidos y halagados que, por primera vez, figuremos en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO”, destacó la viceministra de Relaciones Exteriores Adriana Mira, quien se comprometió, además, a divulgar esta tradición a través de acciones a realizarse en la Red Diplomática y Consular de El Salvador.
La Cofradía de las Flores y las Palmas es un testimonio excepcional de la espiritualidad, creatividad colectiva y continuidad cultural de la comunidad de Panchimalco, cuyas mujeres, portadores, familias y autoridades tradicionales han preservado, transmitido y renovado esta manifestación a lo largo de generaciones.

El Salvador reafirma su compromiso de salvaguardia, en coordinación estrecha con la comunidad portadora, la cual es y seguirá siendo protagonista del proceso. Para ello, El Salvador se compromete a implementar un Plan de Acción Post-Inscripción que fortalecerá la transmisión intergeneracional, la documentación, el desarrollo sostenible local y el respeto por el sentido ritual del elemento, de acuerdo con los principios de la Convención de 2003 de la UNESCO.

Asimismo, esta es la primera designación de la UNESCO en más de 32 años, desde que el Parque Arqueológico “Joya de Cerén”, la aldea que data del Clásico Tardío y que fue abandonada tras la erupción volcánica hace miles de años, alcanzó el rango de Patrimonio de la Humanidad.
