Vivimos un momento fascinante en el que la tecnología ha dejado de ser invisible para convertirse en protagonista. Antes, lo funcional bastaba. Hoy, lo funcional no es suficiente si no conmueve, si no conecta, si no embellece. Cada vez más, elegimos nuestros dispositivos no solo por lo que hacen, sino por cómo nos hacen sentir, cómo se integran en nuestros espacios y cómo expresan quiénes somos.

La revolución del diseño tecnológico no ocurrió de golpe. Fue una evolución paulatina que comenzó cuando las marcas entendieron que el diseño no es una carcasa, sino una experiencia. Desde entonces, el diseño ha moldeado nuestra relación con la tecnología: ha suavizado sus bordes, afinado su lenguaje y embellecido su presencia en el hogar y en la vida diaria. Hoy, un dispositivo puede ser tan emocionante como una obra de arte, tan cálido como un mueble favorito, tan personal como una fotografía.
Como afirmó Naoto Fukasawa, diseñador de renombre internacional: “Solo cuando el diseño es parte del entorno, se convierte en significativo”. Mientras, Dieter Rams, leyenda de Braun se limitaba a decir: “El buen diseño es innovador. Hace útil un producto. Es estético. Y, sobre todo, es honesto”. Incluso Yves Béhar, referente del diseño contemporáneo, lo resume con claridad: “El diseño da vida a las historias. No se trata solo de cómo se ve algo, sino de cómo funciona en tu vida”.
Acer Swift 14 AI y Aspire Vero 16: diseño que potencia lo que eres
Acer y Predator fueron reconocidos con honores en los Good Design Awards 2024, destacándose la nueva Swift 14 AI Copilot+ PC y la eco-consciente Aspire Vero 16. También recibieron la prestigiosa distinción G Mark las laptops Swift Go de 14 y 16 pulgadas, las all-in-one Aspire C Series, y la poderosa Predator Helios 18.
Estos reconocimientos celebran una visión clara: que la tecnología debe estar en sintonía con la vida de las personas. La Swift 14 AI, por ejemplo, está diseñada para quienes se mueven, crean y piensan en todas partes. Con un diseño ultrafino y capacidades de inteligencia artificial, se convierte en una compañera versátil que combina portabilidad con rendimiento.
Por su parte, la Vero 16 demuestra que el diseño también puede ser responsable: hecha con materiales reciclados, redefine la elegancia sustentable. Porque hoy, elegir conscientemente también puede ser hermoso.

Samsung The Frame: el arte como parte del hogar
Con The Frame, Samsung transforma el televisor en una pieza de galería. Su pantalla mate antirreflejo y su marco personalizable hacen que se integre con naturalidad a cualquier ambiente. Pero su verdadero poder está en su capacidad de emocionar: con acceso a más de 2,600 obras de arte clásicas, modernas y contemporáneas —incluyendo colecciones del Louvre, El Prado o Art Basel—, The Frame convierte cualquier espacio en una exposición viva.
Una pieza que se admira incluso cuando está apagada. Y que demuestra que el diseño no solo se ve, también se siente.
Bang & Olufsen Beosound A5: cuando el sonido también se ve bien
Diseñado en colaboración con el estudio GamFratesi, el Beosound A5 de Bang & Olufsen es mucho más que un parlante: es una obra de arte portátil. Con detalles en madera de roble y aluminio, este equipo combina la artesanía escandinava con tecnología de audio de alta fidelidad.
Puedes llevarlo de una habitación a otra, usarlo en interiores o exteriores, y siempre lucirá como una pieza curada con propósito. Una prueba de que escuchar música también puede ser una experiencia estética, sensorial y emocional.
¿Por qué contar esta historia? Porque la tecnología ya no vive en escritorios fríos ni en dispositivos grises. Hoy, se sienta en nuestras salas, nos acompaña a cafés, decora nuestras oficinas y nos sigue al aire libre. Hoy la tecnología vive con nosotros —y eso exige que sea más humana, más bella, más conectada emocionalmente con nuestro entorno. En esta nueva etapa, diseñar tecnología es diseñar emociones. Cada objeto bien concebido, desde una laptop hasta un parlante o un televisor, es una invitación a sentir más y mejor.