
Las MYPES de El Salvador continúan incrementando su protagonismo en las exportaciones nacionales, registrando hasta septiembre de 2025 un volumen formal que supera los US$5.9 millones y con expectativas de cerrar el año por encima de los US$6 millones, manteniendo una tasa de crecimiento anual del 10% al 11%.
Aunque solamente alrededor del 12% de las MYPES cumplen actualmente las condiciones formales para exportar, su participación es estratégica para la economía: estas empresas constituyen el 90% del parque empresarial salvadoreño y son responsables de cerca de 700,000 empleos directos.

Centroamérica es el principal destino
Contrario a percepciones habituales, Centroamérica en particular Guatemala es la región que recibe la mayor cantidad de exportaciones de las MYPES salvadoreñas, superando incluso a Estados Unidos y Europa.
Este dinamismo se acompaña del trabajo de una red de más de 40 casas comercializadoras, establecidas en 33 países, que facilitan la conexión de las pequeñas empresas con clientes internacionales y permiten adaptar la oferta a demandas específicas de mercados clave.
Países escandinavos como Suecia, Dinamarca y Finlandia también cobran relevancia, especialmente para productos de café tostado de origen.
Los productos que lideran las exportaciones
Entre los principales productos exportados por las MYPES destacan:
- Tejidos y prendas de vestir
- Manufacturas de madera
- Manufacturas de plástico
- Juguetes y artículos deportivos
- Calzado
- Productos farmacéuticos y cosméticos naturales, como la crema de coco
- Preparaciones alimenticias, conservas y productos agroindustriales
- Productos nostálgicos (demandados por la diáspora de más de 3 millones de salvadoreños en el exterior)
- Papel y cartón, maquinaria y partes de maquinaria

De manera reciente, el café tostado en origen, procesado y vendido directamente por pequeños caficultores, ha crecido significativamente. Esta tendencia permite conservar la autenticidad del sabor nacional y brinda mayor valor agregado al productor local, incrementando la presencia de café salvadoreño en los mercados especializados.

Desafíos y avances en la formalización
Uno de los grandes retos de las MYPES sigue siendo la formalización. Según Paul Steiner, presidente de Conamype, la formalización no se limita a pagar impuestos, sino a profesionalizar y fortalecer los negocios para acceder a mejores oportunidades de exportación, financiamiento y seguridad jurídica.
En El Salvador, existen alrededor de US$1.1 millones de micro y pequeñas empresas, pero solo entre 6,000 y 7,000 están en proceso de formalización a través de los programas de CONAMIPE y 25 sedes dedicadas en todo el país.
La creación de la figura de Sociedades por Acciones Simplificadas (SAS) en 2024 ha permitido una gestión empresarial más ágil y segura, facilitando que el 90% de las nuevas SAS pertenezcan al segmento MYPE y logrando separar de forma profesional las finanzas personales y las del negocio.
Barreras y perspectiva futura
El acceso a certificaciones internacionales y la simplificación de procedimientos legales y aduaneros continúan siendo puntos críticos para el sector, especialmente ante los altos costos de certificación exigidos en mercados extranjeros como la Unión Europea. Sin embargo, el trabajo conjunto de Conamype con Cancillería y Aduanas impulsa acuerdos de reconocimiento mutuo y redes de apoyo comercial que facilitan la incursión de más MYPES en mercados internacionales.
En conclusión, la dinámica exportadora de las MYPES salvadoreñas presenta avances notables y oportunidades de alto valor, especialmente en productos auténticos como el café tostado de origen y bienes de manufactura, mientras consolidan su presencia en mercados regionales y exploran nuevos destinos.
