
Un nuevo marco para un Acuerdo de Comercio Recíproco entre El Salvador y los Estados Unidos marca un hito en la relación económica bilateral, abriendo oportunidades sin precedentes para fortalecer las exportaciones salvadoreñas, atraer inversión extranjera y modernizar los procesos regulatorios entre ambos países.
Según la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), este logro es resultado de negociaciones sostenidas al más alto nivel por el presidente Nayib Bukele, su equipo económico y la representación diplomática en Estados Unidos. La organización destacó que la decisión confirma la sólida relación comercial que El Salvador ha cultivado con la nación norteamericana, permitiéndole ingresar a un grupo reducido de países con preferencias especiales.

El marco del acuerdo profundiza la alianza existente bajo el Tratado de Libre Comercio CAFTA-DR, vigente desde 2006, y establece compromisos clave para facilitar el comercio. Entre ellos destacan la eliminación de barreras no arancelarias, la agilización de aprobaciones regulatorias para productos estadounidenses —como farmacéuticos, dispositivos médicos y bienes remanufacturados— y la adopción de estándares automotrices de EE.UU. También incluye la aceptación de certificados electrónicos, la simplificación de requisitos de libre venta y la eliminación de trámites como la apostilla.
En materia agrícola, El Salvador se comprometió a prevenir obstáculos al ingreso de productos estadounidenses, adoptando certificaciones emitidas por autoridades regulatorias de EE.UU.

La ASI subrayó que este Acuerdo impulsará el clima de negocios, promoverá el comercio y generará condiciones para que inversionistas nacionales y extranjeros continúen apostando por el país. Asimismo, contribuirá al cumplimiento del “Plan de Desarrollo Industrial 2025-2029”, enfocado en la consolidación de mercados y la integración del sector productivo salvadoreño en cadenas globales de valor.
