Redacción Dinero.com.sv 
La temporada navideña inicia oficialmente en El Salvador con la iluminación de los emblemáticos Árboles Campestre, una tradición que Pollo Campestre ha convertido en parte esencial del espíritu decembrino de miles de familias salvadoreñas.
El encendido oficial se realizó el viernes 5 de diciembre, de manera simultánea en tres puntos del país. En el Centro Histórico de San Salvador se inauguró el árbol más grande de Centroamérica, con 55 metros de altura. Paralelamente, se iluminaron los árboles instalados en el Estadio Miguel Félix Charlaix de San Miguel, de 45 metros, y en el Parque Libertad de Santa Ana, de 45 metros y un árbol en el Aeropuerto Internacional de El Salvador San Oscar Arnulfo Romero y Galdamez.
En el Centro Histórico, Pollo Campestre iluminó la Villa con el Árbol más grande de toda Centroamérica, miles de salvadoreños presenciaron una inauguración majestuosa preparada para celebrar en grande el inicio de la Navidad. En Santa Ana y San Miguel, los asistentes disfrutaron de show de drones, luces pirotécnicas, música, presentaciones especiales, incluyendo el espectáculo de la Chiquigranja, y diversas sorpresas diseñadas para ofrecer una experiencia familiar, segura y llena de magia.
“Para nosotros, la Navidad es un momento para agradecer y compartir. Este año, tenemos el árbol más grande de Centroamérica en el corazón de San
Salvador, una villa impresionante en San Miguel y un imponente Árbol que iluminará el Parque Central de Santa Ana, diseñados para llenar de emoción a quienes buscan un lugar especial para vivir el espíritu navideño,” expresó Conty Aguirre, Gerente de Mercadeo de Pollo Campestre.
UNA TRADICIÓN QUE ILUMINA AL PAÍS
Los Árboles Campestre han trascendido más allá de la ornamentación. Se han convertido en un símbolo de esperanza, unidad y celebración, marcando el inicio de una temporada en la que las familias se reencuentran, agradecen y comparten momentos inolvidables.
Cada año, miles de salvadoreños acuden a estas actividades que ya forman parte del calendario emocional del país: primeras fotos navideñas de niños, abrazos familiares, reencuentros y recuerdos que se guardan para toda la vida.
LA NAVIDAD SABE A CAMPESTRE
A inicios de noviembre, Pollo Campestre lanzó la campaña “Aquí sabe a Navidad”, un homenaje a la familia salvadoreña lleno de sabor, tradición y gratitud hacia quienes han acompañado a la marca por generaciones.
Con esta encendida simultánea, Pollo Campestre da inicio a una agenda navideña llena de magia y festividad, reafirmando su compromiso con las familias salvadoreñas y con la creación de espacios que fortalecen la convivencia y celebran lo mejor del país.
Porque en El Salvador, “Pollo se dice Campestre.”
