Redacción Dinero.com.sv 
La temporada alta de fin de año se consolida como un motor clave para la economía salvadoreña. Entre el 1 de diciembre y el 15 de enero de 2026, el Aeropuerto Internacional de El Salvador “San Óscar Arnulfo Romero y Galdámez” atenderá aproximadamente 756,000 pasajeros, un flujo que dinamiza sectores estratégicos como turismo, comercio, transporte y servicios.
Durante una supervisión operativa, el presidente de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA), Federico Anliker, informó que el aeropuerto recibe alrededor de 17,500 pasajeros diarios, una cifra que refleja la confianza de viajeros nacionales y extranjeros para entrar y salir del país en la época más activa del año.
Impacto económico directo
El incremento de pasajeros tiene efectos inmediatos en la economía:
Mayor gasto turístico en hoteles, restaurantes, transporte y actividades recreativas.
Dinamización del comercio en zonas cercanas al aeropuerto y en destinos turísticos.
Generación de empleo temporal y permanente, especialmente en servicios aeroportuarios y atención al visitante.
Incremento de ingresos fiscales asociados a consumo y operaciones comerciales.
Para atender la alta demanda, 1,800 colaboradores de distintas instituciones (CEPA, Aduanas, Migración, Policía Nacional Civil, VMT y el Ministerio de Salud, entre otras) trabajan de forma coordinada para garantizar procesos ágiles, seguros y eficientes en toda la cadena del viaje. El aeropuerto cuenta con 122 puntos de atención en áreas de prechequeo y aerolíneas, lo que reduce tiempos y mejora la experiencia del pasajero.
Según Anliker, el aumento sostenido de visitantes está vinculado a las políticas de seguridad que han fortalecido la imagen del país como un destino confiable y atractivo, incentivando el retorno de salvadoreños en el exterior y la llegada de turistas internacionales en Navidad y fin de año.
Con estos volúmenes de tráfico, el aeropuerto se posiciona como una infraestructura clave para el crecimiento económico, facilitando la conectividad, el turismo y la inversión, y reforzando el papel del sector aéreo como catalizador del desarrollo nacional.
