La Dirección General de Energía, Hidrocarburos y Minas (DGEHM) llevó a cabo una inspección en la distribuidora Rapigas, ubicada en Ciudad Versalles, San Juan Opico. Durante el procedimiento, los técnicos detectaron cilindros de gas propano de 25 libras, de la marca Tropigas, que contenían 1.5 libras menos del peso estipulado. Este hallazgo puso en evidencia irregularidades que afectan directamente a los consumidores.
Ante esta situación, los inspectores tomaron medidas inmediatas para proteger a la población. Los cilindros que no cumplían con los estándares de peso fueron marcados para impedir su comercialización, evitando que llegaran a los hogares salvadoreños. Estas acciones son esenciales para garantizar que los usuarios reciban la cantidad de producto por la que pagan.
Además, se realizaron mediciones precisas del peso de la tara y la capacidad volumétrica de los cilindros para certificar su cumplimiento con las normativas vigentes. Este proceso técnico no solo previene fraudes, sino que también refuerza la confianza en las instituciones que regulan el sector energético.
La DGEHM reafirmó su compromiso de proteger los derechos de los consumidores y anunció que continuará realizando inspecciones similares en todo el país. Estas acciones buscan fortalecer la regulación y garantizar que los salvadoreños reciban productos que cumplan con altos estándares de calidad y seguridad.