Denis Muñoz 
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha emitido un bono global de US$1.000 millones destinado al desarrollo sostenible. Este bono representa un esfuerzo significativo por parte de la institución para financiar proyectos que promuevan la sostenibilidad y el crecimiento económico en distintas regiones del mundo.
La distribución del monto de la emisión está orientada a maximizar el impacto global. Así, el 56% de los fondos se destinarán a las Américas, mientras que el 41% se asignará a Europa, Medio Oriente y África. Solo el 3% del total se dirigirá a Asia y el Pacífico, reflejando una estrategia enfocada en las regiones con mayor necesidad de apoyo para el desarrollo sostenible.
En cuanto a la asignación de los fondos entre instituciones, el 17% se distribuirá entre gestores de fondos y corporaciones. Los bancos y bancos privados recibirán el 66% de los fondos, mientras que el restante 17% se destinará a bancos centrales e instituciones oficiales. Esta estructura está diseñada para asegurar una participación amplia y efectiva en la implementación de proyectos sostenibles.
El bono global de la BID contará con cuotas de pago trimestrales y tendrá un vencimiento programado para el 1 de agosto de 2029. Esta estructura de pagos permitirá a la BID gestionar de manera eficiente el flujo de fondos y asegurar la continuidad del apoyo a iniciativas de desarrollo sostenible a lo largo de su vigencia.
