
El Salvador registra una clara baja en las tasas de interés promedio ponderado del sistema financiero, con datos del Banco Central de Reserva (BCR) que muestran descensos consistentes desde marzo hasta noviembre de 2025. Esta tendencia reduce costos para prestatarios y ajusta rendimientos para ahorradores, facilitando mayor actividad económica en un contexto de estabilidad.
Los datos mensuales revelan una caída progresiva en tasas de depósitos y préstamos, como depósitos a 30 días de 4.14% en marzo a 3.45% en noviembre, y a 360 días de 5.93% a 5.39%. Esto refleja mayor liquidez bancaria y menor demanda agresiva de crédito, con préstamos hasta 1 año pasando de 7.85% a 7.83%, y los de más de 1 año de 11.85% a 10.95%, impulsado por operaciones contractuales ponderadas por participación institucional.

Consecuencias Directas
Prestatarios empresariales ven alivio en tasas de 7.89% (abril) a 7.75% (noviembre), mientras en largos plazos de 13.6% a 12.91%. Ahorradores reciben menos en depósitos, como 150 días de 5.57% a 4.64%, y reportos en Bolsa de Valores caen de 6.05% a 4.12%, desviando fondos hacia inversiones productivas en lugar de ahorro.

Beneficios para la Economía
Hipotecas estables en 7.9-7.91% facilitan acceso a vivienda, y préstamos a empresas de 10.2% (abril) a 10.12% (noviembre) liberan capital para expansión y empleo local. En total, tasas más bajas desde marzo (ej. 180 días de 5.45% a 4.85%) estimulan consumo, inversión y crecimiento sin sobrecalentamiento, beneficiando regiones como Mejicanos al abaratar financiamiento para hogares y negocios.
