1. Analiza el estado de tus finanzas
Antes de imaginarte en una playa paradisíaca, revisa si tus finanzas están al día. Sabiendo con lo que cuentas, comienza la preparación. Si el panorama no es alentador, la decisión apropiada es ahorrar para una próxima oportunidad.
2. Planifica con anticipación
No dejes el viaje vacacional para el último momento, porque perjudica tu estabilidad económica. Planificar con suficiente tiempo ofrece mayor probabilidad de encontrar paquetes.
Compara precios de los boletos aéreos y del hospedaje. Indaga lo relativo a la comida, los paseos y el transporte. De ser posible, escoge un mes de temporada baja, ya que todo es más barato.
3. Establece un presupuesto
Cuando calculas los gastos y fijas un límite, minimizas las probabilidades de despilfarro. La idea es establecer un presupuesto que abarque el alojamiento, los sitios a visitar, lo que deseas comprar y el traslado. Considera una cantidad adicional para imprevistos.
4. Paga por adelantado
Saldar por cuotas o en un único pago anticipado alivia la carga del gasto total, en especial para el hospedaje y lo que este incluya. Pregunta a los proveedores si ajustan el paquete para cancelarlo en porciones cómodas.
5. Recuerda los gastos fijos
Al margen del dinero concerniente a las vacaciones, queda el correspondiente a los gastos permanentes. No utilices el presupuesto ordinario para las vacaciones.