El Gobierno de El Salvador ha logrado un importante avance en la política de vivienda, reflejado en una inversión de US$123.74 millones en activos extraordinarios para la colocación de 9,308 casas que antes estaban en manos de estructuras criminales. La ministra de Vivienda, Michelle Sol, destacó que estos resultados son fruto de un trabajo coordinado entre diversas instituciones, posible gracias al entorno de seguridad que el país ahora experimenta.


La ministra Sol señaló que la labor del Fondo Social para la Vivienda (FSV) ha sido fundamental en este logro. A través de diferentes líneas de crédito, se han otorgado más de 11,000 préstamos para vivienda nueva, con un valor de US$404.94 millones. Además, se han destinado US$449.47 millones a 22,926 créditos para la compra de vivienda usada, demostrando un compromiso integral con las necesidades de las familias salvadoreñas.

El Ministerio de Vivienda no solo se enfoca en el financiamiento, sino también en la legalización de terrenos. A la fecha, la Dirección de Legalización de la Propiedad ha regularizado más de 70,000 lotes, otorgando certeza jurídica a miles de familias. Este proceso garantiza que quienes han esperado por años puedan ser dueños legales de sus tierras, un paso crucial para la seguridad y el bienestar de las comunidades.

Un caso emblemático en este esfuerzo ha sido el de ARGOZ, donde el Ministerio ha asumido el trabajo técnico para hacer justicia a las familias que fueron víctimas de irregularidades inmobiliarias. Michelle Sol reiteró que cada lote regularizado representa una victoria, un hito que beneficia a las familias que han luchado por un techo digno y legal en un país más seguro.

La ministra concluyó reiterando el compromiso del Gobierno de seguir trabajando para que más salvadoreños accedan a una vivienda digna y propia. La meta es clara: cada familia debe tener la oportunidad de construir un hogar con el respaldo del Estado, en un entorno de paz y legalidad. Esto no solo mejora la calidad de vida, sino que también impulsa la economía.

La inversión en vivienda y la legalización de terrenos son pilares para el desarrollo económico y social del país. La política del Ministerio de Vivienda no solo busca ofrecer un techo, sino también fomentar la seguridad patrimonial y la estabilidad de las familias, lo que a su vez se traduce en una mayor confianza y un crecimiento sostenido para la nación.
