Para el primer semestre de 2024, los indicadores del sistema financiero salvadoreño muestran un crecimiento sólido, según el Banco Central de Reserva (BCR). En el sector financiero, el crecimiento fue especialmente notable. Alcanzó una variación interanual del 9.7% en junio, consolidándose como el segmento económico con mayor expansión dentro de la economía salvadoreña.
Por otro lado, según la Asociación Bancaria Salvadoreña (ABANSA), el Índice de Volumen de la Actividad Económica (IVAE) mostró un crecimiento interanual de 0.03% a mayo de 2024. A pesar de este bajo dinamismo, los sectores financieros mantuvieron un comportamiento positivo gracias a la mayor demanda de créditos y la confianza de los ahorrantes.
El saldo de los préstamos presentó un aumento interanual de más de US$897 millones, lo que representa un crecimiento del 5.6%. Los depósitos, por su parte, también registraron un incremento significativo, equivalente a un 4.8% de crecimiento interanual. Este comportamiento refleja una tendencia de recuperación frente a la desaceleración observada en los últimos meses de 2023.
A pesar de esta desaceleración a finales del año pasado, los expertos proyectan que, con el continuo incremento en los depósitos y créditos, esta tendencia alcista se mantendrá. El sector financiero sigue siendo un motor clave para la economía, impulsando tanto la inversión como el consumo.
Se espera que el fortalecimiento del sistema financiero y el dinamismo de los créditos y depósitos contribuyan a un entorno económico más favorable para los próximos meses, generando mayor confianza en los agentes económicos.