«La inversión que ha realizado desde el 2019 el Gobierno de El Salvador en materia de infraestructura y tecnología -en las aduanas- es de más de US$40 millones», reiteró el funcionario.

El funcionario indicó, que anteriormente el despacho, en El Amatillo, se demoraba días, lo que provocaban largas filas de los furgones, pero ahora se han agilizados los procesos para que puedan circular de forma rápida.

Hace un mes en El Amatillo ha recibido una buena retroalimentación de los motoristas que hacen uso de este paso, ya que «ahora, una vez que pasan por el punto fronterizo ya no se detienen del lado de Honduras, sino que van en tránsito ya hacia su destino final».

Los resultados han sido favorables por lo que serán replicados este año en fronteras que son limítrofes con Guatemala, como los son Anguiatú y La Hachadura, y que en ambos casos los funcionarios guatemaltecos se trasladarán a El Salvador.

Otra de las innovaciones que está experimentado Aduna es la implementación de la declaración anticipada, que inició a ejecutarse en 2022, y que, según Mayorga para este año funcionará en todas las aduanas del país con la integración de El Poy, que era la única que estaba pendiente de integrarse a este sistema.

«Este es el trabajo que tenemos para este año como Dirección General de Aduanas, el concluir la declaración anticipada en todos los puntos fronterizos, señalando que solo es una frontera en la que falta por implementar este mecanismo», acotó el director.

También el gobierno desarrolla un sistema de declaración anticipada para viajeros, el cual ya funciona en los aeropuertos de El Salvador e Ilopango.

La digitalización de estos procesos significa un ahorro económico para el Estado de hasta US$1 millón por año al ya no tener que imprimir todos los documentos.