Dicho empresario es originario de Santa Tecla, actualmente tiene dos décadas de residir en Canadá, en su estadía recorrió la finca, de esta manera logró degustar el pacamara, una variedad nativa que se caracteriza por sus aromas frutales y florales intensos. De igual manera, pudo conocer otras variedades que se cosechan en el territorio.
“Somos salvadoreños y el ombligo está atado al país y a pesar de todos los años queremos hacer comercio, además de beneficiar al país, más ahora que está cambiando y darle empuje a nuestro El Salvador”, manifestó el empresario que ha identificado el potencial para colocar el grano salvadoreño en los mercados de Canadá.
Además, añadió que el café salvadoreño es muy diferente a lo que están acostumbrados en Canadá, porque en la mayoría de los lugares es muy comercial; en cambio, el café salvadoreño es especial.
Está convencido que esta bebida puede tener espacio en dicha nación norteamericana dado a que “siempre hay gente que quiere tomar una buena taza de café”, ventaja competitiva que, sin lugar a duda, se encuentra en el producto salvadoreño.
Por ello, agradeció a la Cancillería y al Consulado en Calgary por el acompañamiento brindado en este acercamiento. “Sin la ayuda del cónsul Juan Salamanca no estaría acá”, añadió.
Asímismo, el empresario tuvo la oportunidad de sostener un encuentro con el director de Diáspora y Desarrollo, Gerardo Pérez, y el presidente del Instituto Salvadoreño del Café, Mauricio Sansivirini, oportunidad en donde le ampliaron la información sobre el grano de oro, así como el apoyo que esta cartera de Estado brinda los connacionales que quieran comercializar este producto en el exterior.
En este espacio, el presidente Sansivirini y personal del ISC le brindaron información histórica, así como las zonas de cultivo, entre otra información técnica que será clave para este proceso.
Durante su visita, también recorrió la planta de procesamiento y envasado del café, donde pudo explorar las diversas opciones de empaques, tamaños y métodos de envío disponibles para expandir las oportunidades de exportación y comercialización del café salvadoreño en ese mercado.