Hay herramientas desde las que organizar el presupuesto mensual de un hogar, con detalles como dónde se destina más o menos presupuesto, a apps que localizan rebajas en productos y servicios de todo tipo.
Aprovechar descuentos adicionales. En épocas en las que se concentran rebajas o promociones estacionales, es inteligente sumar esos descuentos a otros adicionales (cupones, por ejemplo), logrando así un porcentaje mayor de ahorro.
Organizar el presupuesto mensual. Saber qué y cuánto gastamos al mes es básico para llevar las cuentas al día y guardar parte de los ingresos. Ya organizado el presupuesto mensual, con gastos fijos como vivienda, será más sencillo saber qué parte irá destinado a llenar la hucha.
Comparar precios. Antes de dejarse llevar por el impulso de compra al dar con un descuento, es recomendable pararse a comparar, teniendo en cuenta que hay comparadores que ya hacen ese trabajo.
-Comparar gasolineras y elegir bien: llenar el depósito es caro y la subida de los carburantes es una realidad que todos conocemos. Sin embargo, hay estaciones de servicios más caras y otras más baratas.
-Cambiar de tarifa móvil: los expertos recomiendan apostar por las compañías bajo costo y analizar las ofertas y tarifas que ofrece cada operador.