Este descuido puede tener graves consecuencias para las empresas en términos de aumento de costos, ralentización del potencial de crecimiento y reducción de la ventaja competitiva.
1-Capacidad reducida para pagar la deuda: Esto puede llevar a las empresas a incurrir en costos crecientes sin un aumento correspondiente en los ingresos para compensar. Las empresas pueden quedar en una situación precaria si se consume demasiado de su capital pagando deudas con intereses elevados.
2-Crecimiento más lento: Cuando las tasas de interés aumentan, las empresas a menudo alcanzan tasas de crecimiento más lentas debido a la dificultad para acceder a los préstamos, así como a los costos más altos asociados con los préstamos.
3-Negocios con dinero flotante: Con este aumento los ingresos por intereses de los bancos y las instituciones aumentan a su vez. Como tal, una flotación más alta podría conducir a mayores rendimientos cuando las tasas de interés suben. No solo eso, sino que también puede ayudarlos a expandir su negocio en un momento en que los competidores tienen problemas para mantenerse al día.
4-Empresas con flujo de caja positivo: Las empresas pueden beneficiarse potencialmente cuando aumentan las tasas de interés porque pueden invertir su dinero en valores de mayor rendimiento.
Cuando aumenta la tasa de interés general en el mercado, las empresas con flujo de efectivo positivo pueden usar este capital excedente para comprar valores e inversiones que pagan un rendimiento más alto que antes, lo que les permite aumentar aún más su flujo de efectivo positivo y mantener la liquidez.