Un componente que es clave para mantener al cuerpo saludable y fuerte es el cuidado de la inmunidad, pues es el sistema de defensa del organismo contra infecciones. Se conoce que existe una estrecha relación entre la inmunidad y la calidad de la alimentación. Esto hace que sea crítico consumir una dieta equilibrada nutricionalmente.
El especialista de Herbalife comparte a continuación tres grupos esenciales de nutrientes que pueden ayudar a fortalecer el sistema inmunológico para mantenernos saludables:
1. Proteína: también conocida como los bloques de construcción básicos del cuerpo, la cual permite al mismo fabricar anticuerpos que requiere para defenderse contra virus y bacterias invasoras. Para asegurar de que se tienen niveles suficientes de proteína en la dieta, se puede optar por alimentos fuente de este nutriente como: pescado, aves de corral, carnes magras, alimentos a base de proteína de soya, huevo y productos lácteos bajos en grasa.
2. Vitaminas y fitonutrientes: las vitaminas A y C, así como los fitonutrientes, son jugadores clave en la salud del sistema inmunológico. La vitamina C participa en el proceso de producción de anticuerpos que combaten enfermedades mientras que la vitamina A apoya la salud de la piel, los tejidos del tracto digestivo y el sistema respiratorio. Además, los fitonutrientes antioxidantes, que se encuentran en verduras y frutas, reducen el estrés oxidativo del cuerpo, lo que puede debilitar su capacidad para combatir enfermedades. Por último, se ha demostrado que varios fitonutrientes reducen el riesgo de cáncer y enfermedades cardiovasculares, son antiinflamatorios, impactan positivamente en la presión arterial y promueven la salud general del sistema inmunológico.
3. Probióticos y prebióticos: el sistema digestivo desempeña un papel central en el apoyo a la función inmunológica. El tracto intestinal es una de las principales vías de contacto con el entorno externo y el balance de su microbiota puede impactar positivamente a nivel inmune. Los probióticos son microorganismos vivos que confieren un beneficio a la salud de las personas que los consumen en cantidades adecuadas, mientras que los prebióticos son sustancias que pueden ser usadas como alimento por los probióticos.