El 20% de los salvadoreños que retorna deciden emprender con los recursos adquiridos en Estados Unidos.
Ante esto el Banco Hipotecario, lanzó la línea de crédito «Transformando Vidas», dirigida a personas del programa Movilidad Laboral que inician su propio negocio, personas retornadas, y otras en riesgo de migrar irregularmente.
Algunos de los requisitos para obtener estos créditos es tener la nacionalidad salvadoreña, tener al menos 21 años y con un negocio en funcionamiento de al menos 12 meses. Los préstamos van desde US$2,000 hasta US$10,000, dependiendo del caso de cada emprendedor.
Francisco Orellana, es uno de los casos de éxito, que no solo generó un cambio para su familia, sino también impactó a su comunidad al ser precursor del desarrollo local en el cantón el Achiotal, San Pedro Masahuat, La Paz.
Creando empleos directos en los diferentes emprendimientos como la compra y distribución de mariscos, el cultivo de plátano y de loroco. Este último produce alrededor de 150 libras semanales en época de verano y en invierno es más abundante.
Abraham Aguilar, hizo cumplir su sueño: el de instalar su propio proyecto de emprendimiento, una plantación de achiote en Rosario de Mora, San Salvador, su lugar de origen.
“Gracias a las ganancias que logré obtener cuando trabajé en Estados Unidos, invertí en sembrar 800 arbolitos de achiote. El objetivo es tener nuestra propia semilla, ya que el achiote no es un cultivo local, cuesta mucho encontrarlo, hay que importarlo de otros países”, afirmó Abraham Aguilar.
Asimismo, resaltó que el programa le permitió una oportunidad de empleo que le ha llevado a cumplir parte de sus proyectos personales, así como el beneficio a la comunidad a partir de su emprendimiento.