Usualmente en el crédito hipotecario se usa como garantía a la misma vivienda que se está financiando, u otra propiedad raíz. Es por ello que deciden que una vivienda está hipotecada cuando está siendo usada como garantía para el pago del crédito.

Seleccione la entidad: existen varias instituciones financieras que ofrecen créditos hipotecarios. Es recomendable que no se vaya con la primera opción que encuentre, sino que revise varias alternativas para ver cuál se ajusta mejor a sus necesidades.

Cuide los intereses: no olvide que muchas veces, los intereses pueden hacer que sus deudas aumenten cuando no se realizan los pagos a tiempo. En el caso del crédito hipotecario, busque aquel que le ofrezca los más bajos y pregunte sin son fijos o variables.

Comisión por apertura: otro punto que es necesario que analice es la comisión que le pueden cobrar por la apertura del crédito. No todas las instituciones bancarias hacen este cobro, pero es necesario tenerlo en cuenta para efectuar comparaciones.

Denominación: pregunte si el crédito que se le otorgará será en moneda local o si está atado a alguna unidad de referencia. Si está considerando esta última, toma en cuenta que el valor de la cuota se ajusta dependiendo de la inflación, por lo que debe considerar este factor adicional antes de decidir.